Cómo llevarlo y cuidarlo
 

Diseñamos y construimos nuestros productos con el objetivo de que nunca quieras quitártelos. Aun así, para una mejor experiencia, es importante que sigas las recomendaciones de uso y cuidado aquí descritas. Es importante conseguir el ajuste correcto para que los sensores de los dispositivos funcionen bien. Estas recomendaciones, los materiales utilizados y nuestros estándares y protocolos de seguridad, han sido elegidos y desarrollados en colaboración con los principales expertos en la materia y más de una década de experiencia en la creación de tecnología wearable. Seleccionamos nuestros materiales a través de un riguroso proceso de evaluación y prueba que supera las regulaciones existentes. El objetivo es proporcionarte productos que te ayuden a llevar una vida más activa y sana, sin dejar de proteger tu muñeca.

 

Da un respiro a tu muñeca

  • Si tienes molestias, afloja la correa y, si te sigue molestando, quítatela.

 

  • Para empezar, es importante que la muñeca descanse regularmente quitándote el dispositivo durante una hora más o menos después de un uso prolongado. El momento ideal para ello es durante la ducha. Aunque te puedes duchar con nuestros productos resistentes al agua, no hacerlo reduce la exposición a jabones, champús y acondicionadores, que pueden causar daños a largo plazo en el producto e irritación cutánea.

 

  • Además, ten en cuenta que si tienes eccema, alergia con asma o cualquier otro tipo de afección cutánea, eres más propenso a sufrir irritación por el uso del dispositivo.

 

  • Recuerda, si empiezas a notar cualquier irritación de la piel u otra molestia en la muñeca o en la mano, como enrojecimiento, dolor, hormigueo, entumecimiento, ardor o rigidez, quítate el dispositivo. Si alguno de esos síntomas persiste, contacta con nuestro servicio de atención al cliente y considera la posibilidad de acudir al dermatólogo.

 

    Haz clic aquí si deseas más información sobre cómo llevar puestos nuestros productos.

 

No lleves el dispositivo demasiado apretado

  • Asegúrate de que la correa no quede demasiado ajustada. Llévala lo suficientemente holgada como para que se pueda mover hacia arriba y abajo en la muñeca. Mientras haces ejercicio, ponte la pulsera dos o tres dedos por encima del hueso de la muñeca y mantenla firme pero sin que te apriete. Nuestros sensores de frecuencia cardiaca funcionan mejor cuando están en contacto con la piel. Colócate la correa en una zona más baja de la muñeca y aflójatela un poco después del ejercicio.

 

  • Como siempre, si tienes molestias, afloja la correa y, si te sigue molestando, quítatela y dale un descanso a tu muñeca.

 

    Haz clic aquí si deseas más información sobre cómo llevar puestos nuestros productos.

 

Mantén el dispositivo limpio y seco

  • Limpia con frecuencia tanto la correa como tu muñeca, especialmente después de hacer ejercicio, sudar o lavarte las manos. No utilices jabón de manos, jabón corporal, lavavajillas, desinfectantes de manos, toallitas limpiadoras, limpiadores domésticos ni productos similares para limpiar la correa y el dispositivo, dado que son difíciles de eliminar por completo y podrían permanecer bajo la correa, irritando la piel. En su lugar, utiliza agua y un limpiador sin jabón (como Cetaphil) para limpiar la correa. Además, para minimizar posibles daños al producto y de irritación de la piel, evita el contacto directo con protectores solares y aerosoles repelentes de insectos. Quítate siempre el dispositivo mientras te aplicas este tipo de cremas o espráis.

 

  • Ten en cuenta que algunas de nuestras correas, como las de cuero, metal y materiales tejidos, solo están pensadas para ser usadas durante la actividad diaria normal (y no durante entrenamientos).

 

  • Además, aunque algunos de nuestros dispositivos son resistentes al agua y las salpicaduras, siempre es aconsejable que te lo quites cuando se moje y lo seques bien antes de volver a ponértelo.

 

    Haz clic aquí si deseas más información sobre cómo limpiar nuestros productos.

    y aquí para más información acerca de la resistencia al agua de nuestros

    productos.

 

Sensibilidad cutánea

A pesar de todos nuestros esfuerzos, hay personas que pueden reaccionar ante ciertos materiales. Generalmente se trata de eccemas, alergias u otras afecciones de la piel, que empeoran al entrar en contacto con irritantes como el sudor o el jabón que quedan bajo la correa. Si sabes que padeces alguna alergia cutánea, ten en cuenta que nuestros productos pueden contener los siguientes materiales:

 

 • Níquel. Nuestros dispositivos pueden contener níquel. Sin embargo, es una cantidad mínima y no supera las estrictas restricciones establecidas por la normativa europea REACH. Por lo tanto, aunque es poco probable que la exposición a estos niveles de níquel cause reacción, debes ser consciente de esta posibilidad en caso de que seas alérgico.

 

 • Acrilatos. Nuestros productos pueden contener trazas de acrilatos y metacrilatos de los adhesivos utilizados en ellos. Aunque se encuentran en muchos productos de consumo que entran en contacto con la piel, hay personas alérgicas a ellos. Por eso trabajamos para garantizar que nuestros productos cumplen con las rigurosas especificaciones de diseño y los requisitos de estrictas pruebas, reduciendo al mínimo las reacciones a estos adhesivos.

 

 

Correas de marcas de terceros 

         • Las correas de terceros pueden no encajar correctamente y contener materiales que causen reacciones alérgicas en la piel u otros problemas de salud. Para obtener los mejores resultados, utiliza únicamente correas de la marca Fitbit o autorizadas por Fitbit.

     

Carga

         • Asegúrate de que no haya objetos de metal como, por ejemplo, joyas, cerca del cargador. Desenchufa el cargador una vez se haya cargado por completo el dispositivo.